La tercera gravEDAD

Van pasando los años, y nos parece que pasan rápido. En realidad nos lo parece cuando ya han pasado y, por consiguiente, han quedado atrás... pero no mientras están pasando. Quizá demasiados recuerdos acumulados? Por eso no nos acordamos de todo y parece que hemos hecho menos cosas, pero eso es cosa de la memoria de cada uno... o de las ganas de recordar.

Yo soy de los que piensa que la edad es tan sólo un número que se nos asigna año tras año según el tiempo que llevemos en el boyo. Gente que tiene ese número algo elevado reniega a hablar con los que lo tenemos algo más bajo, argumentan falta de experiencia o de madurez hacia los segundos. La misma madurez que ellos demuestran cuando etiquetan a alguien según saben su edad, sin tan siquiera interesarse por conocer a esa persona. Para mí, eso tiene una definición bastante clara, y es la de prejuicios.

Por ejemplo, es que alguien va a hacer mejor un exámen de Historia porque se tire dos horas escribiendo que el que lo termina en una hora? Que me lo digan a mí, que en los exámenes cuento la vida de Zidane... y así me iba a veces.

En el fondo me considero un verdadero pro a favor de las personas que tienen más edad que yo, y también ellas me aportan beneficios. Que qué me aportan? Pues seguro que alguno tiene coche, jaja. Que qué aporto? Quizá les ayude a recordar algunas etapas de su vida que, por circunstancias, han olvidado y que tanto añoraban, esa etapa que coincidía cuando su número particular era más bajo. Sí sí, ese mismo número del que reniegan cuando suman algunos más.

Y es que no es que nos hagamos mayores, solamente vamos acumulando juventud.