Hay cosas que el dinero no puede comprar.
Bastante gente discutiría esa frase diciendo "sí, claro, pero yo quiero que me toque la lotería". Y no se lo discuto, a mucha gente (yo incluído) le gustaría que le tocase la lotería, pero alguna vez nos hemos puesto a pensar en la parte mala de que te toque la lotería?
En mi pueblo hay un hombre que tiene un bar donde se vendía lotería. A este señor le tocaron 1000 millones de las antiguas pesetas y, en ese momento, su personalidad cambió al 100%. Se volvió un hombre encerrado, nunca volvió a echarse su mus con los amigos los domingos por la tarde mientras veían al Real Madrid. Esos momentos creeis que los puede comprar el dinero? Quizá te los puede quitar, como en este ejemplo.
El señor se compró un piso en Aluche para su hija y, a día de hoy, con 1000 millones de pesetas en la Caja de Ávila sigue barriendo su bar los domingos a las 0:00. Pero no lo atiende por la mañana ya que, en vez de un bar, se ha convertido en una tienda de pesca que abre de muy de vez en cuando.
A vosotros os parece esto ser feliz? Yo pienso que el dinero te puede cambiar la personalidad hasta el momento de olvidar a tus verdaderos amigos por la razón de que lo único que quieren es aprovecharse de tu dinero. O justo en ese mismo momento te aparecen nuevos amigos de la nada... adivinad lo que quieren. O nuevas mujeres jóvenes y guapas que sólo hacen destrozar un matrimonio de 35 años, aunque bueno, si vienen con propósitos complacientes se las puede perdonar, jejeje.
A veces pienso que sí, que me molaría que me tocara la lotería pero... me comportaría igual o cambiaría?
Yo, cada fin de año, pido para el nuevo año que me deje igual que estoy. Tengo la fortuna más preciada que puede tener una persona, y esa fortuna es ser uno mismo.
1 comentario
superdanonino -
Para todo lo demás, Mastercard.